domingo, 10 de agosto de 2008

De regreso

Hace aproximadamente cinco horas volvÍ de Mar del Plata.
La pasé bien, dentro de todo, qué sé yo.
Por lo menos no estoy tan gorda como pensé que iba a terminar, pero bueno.
Necesitaba ese descanso.

Ya no sé qué hacer.
No quiero tener amigos, pero por otro lado sí los quiero. O sea, eso no tiene sentido pero mi cabeza lo piensa todo el tiempo.
En realidad, creo que ya no quiero ver a mi amiga Victoria(es decir, mi única amiga). No sé qué pasa, realmente no sé. Bueno, lo que sé es que la que hace los problemas acá soy yo. YO no la quiero ver, YO me siento confundida, YO me estoy volviendo loca, YO, YO, YO...
Sí, estoy absolutamente egoísta pero ya no lo puedo evitar, no lo aguanto.
Me siento muy mal conmigo.
No sé, es raro.
En el día me siento bien, estoy más cuerda y normal, pero a la noche me deprimo y me atiborro de pensamientos contrariados.
Es decir, es como que en las noches mi cerebro trabaja debatiendo sobre todo lo que cruza por él, y en el día sólo recuerdo todo eso, todo el tiempo. Y así siempre.

No sé por qué exactamente no quiero ver más a Vicky. Bueno, quizás sí.
Es que ella ahora está llena de amigos por todos lados, pero les puedo asegurar que son buenos chicos y que son sus amigos de verdad, no es digamos una amistad cualquiera, falsa. Se quieren de verdad, y creo que eso es lo que más me duele.
Dirán que estoy celosa, y quizás un poco lo esté, pero no tanto. Si estuviera tan celosa no querría no verla, al contrario, haría lo posible para que ella no quiera más a sus nuevos amigos o algo así, qué sé yo, como los celosos. Pero no, yo no quiero eso ni lo hago.
Creo que cada día nos diferenciamos más. Bueno, siempre fuimos diferntes; creo que por eso nos "atrajimos"(teoría de los polos opuestos - creo un poco en eso, es la misma experiencia). Pero ahora estamos muy distintas. O será mejor decir que yo estoy distinta, que no sigo los parámetros que debería seguir como una adolescente actual.
Qué sé yo.
Ya no quiero salir a ningún lado ni conocer a nadie ni nada.
Pero por otro lado sí lo quiero.
Quiero salir, me encanta; quiero tener amigos que me comprendan y que me puedan escuchar sin reproches ni nada, y yo a ellos. Pero no sé qué me pasa, no sé.
Me pone verdaderamente muy mal no poder comprender qué mierda tengo en la cabeza que me hace pensar y actuar así.
¿Por qué no puedo cambiar y hacer las cosas bien?
¿Por qué no puedo ser buena con los que quiero, tratarlos bien y demás, como ellos se merecen?
¿Por qué no puedo nada de lo que quiero?
¿Por qué?
Por qué...

POR QUÉ MIERDA
POR QUÉ

SÍ, ME ODIO
ODIO ESTA SANGRE QUE CORRE POR MIS VENAS
ODIO NO PODER SER UNA BUENA AMIGA
NO PODER SER AMIGA
NO PODER SER BUENA HIJA, NIETA
NO PODER SER PERFECTA
NO PODER HACER LO QUE SIEMPRE DIJE QUE ME GUSTA HACER
ODIO PENSAR QUE NO PUEDO HACER TODO ESTO CUANDO SÍ PUEDO
ODIO TENER QUE PENSAR QUE HAY UN DIOS QUE NOS MIRA Y NOS CUIDA Y NOS PERDONA Y QUE NOS VA A DAR UNA VIDA ETERNA EN GLORIA Y QUE LE TENGO QUE DAR ALABANZAS
ODIO TENER QUE HACERLO PORQUE MIS PADRES DIERON SU VIDA PARA QUE YO LO HAGA COMO ELLOS
ODIO LLEVARME MEJOR CON EXTRAÑOS QUE CON CONOCIDOS
ODIO SER INSENSIBLE
ODIO NO PODER LLORAR, NO PODER MOSTRAR UN SENTIMIENTO LIMPIO Y PURO
ODIO NO PODER MOSTRARME SINO A TRAVÉS DE UN PERSONAJE
ODIO OCULTAR TODAS MIS COSAS
ODIO QUE ME GUSTE HACERLO
ODIO TENER QUE SER ASÍ
ODIO SER ASÍ
ODIO NO PODER CAMBIAR
ODIO PODER CAMBIAR Y NO HACERLO
ODIO TENER QUE SER YO
ODIO SER YO
ME ODIO
ODIO TENER QUE EXISTIR, QUE EXISTA ESTE MUNDO Y NO SABER NADA SOBRE ÉL NI NADA DE NADA
ODIO, ODIO, ODIO




Cuando estaba en el hotel, hace unos días, ví una película, empezada, pero estaba muy buena.
Estaba buena porque veía mi vida casi perfectamente reflejada en ella.
Es decir, me veía a mi misma allí, en ese personaje, que parecía decir mis pensamientos más profundos sin consultarme.
Lo amé.
Ah, si, la película se llama "Girl, interrupted"; en castellano, "Inocencia interrumpida".
Se las recomiendo absolutamente.

No sé.
Yo era esa chica, sin las relaciones promiscuas y con un desorden alimenticio(padecido por otra chica que, casualmente, quería pesar lo mismo que yo quiero pesar).
Si mi mamá hubiera sabido que esa chica me representaba ampliamente, quizás le hubiera puesto más atención(que suerte que no lo hizo).


A partir de este momento, Ana vuelve a mí, vuelve para quedarse, para mezclarse en mis pensamientos, para hacerme perfecta, sin importar nada.
Porque ya no me importa nada.

1 comentario:

. dijo...
Este comentario ha sido eliminado por el autor.